Tempus fugit

El tiempo huye...¿y nosotros corremos para alcanzarlo?...

Preñeces

Hay silencios fecundos, preñados de respuestas, como la oración, la meditación, y la navidad es un tiempo propicio.

Hospitalidad

La hospitalidad, como muchas otras cosas, es asimétrica. Simplemente se da o no; otra cosa es transacción, no confundamos.

Por algo son ilusiones.

¿Estamos preparados para que rompan nuestras ilusiones ?

Cada vez que sucede, comprendo que algunas mías son inquebrantables, las acaricio como siempre, aunque sepa que muchas veces no son posibles. Otros lo llaman perseverancia o tozudez.

Silencios

Mucho peor que una buena pelea es un mal silencio posterior a ella.

Insistencia.

No siempre un NO es definitivo. Hay muchas negaciones que son un "por el momento". Si te importa, insiste.

Íntimo y privado

A mayor sobajeo en público, menos creo en que el cariño sea verdadero, pues cuando lo es, entiendes que el amor humano es lo más íntimo y privado, una atmósfera para dos, y una mirada ajena es intromisión.

Sin pérdidas

La inteligencia no es sinónimo de sabiduría. Habiendo muchos inteligentes, pocos son sabios. Que en nosotros no haya pérdida, aunque no todos seamos genios.

Hambre real

Mientras en occidente veamos alimentos tirados que nadie recoje, es muy difícil creer que hay hambre en el mundo.

Sufrimientos.

Se sufre solo. Los que nos aman pueden sufrir solidariamente por nosotros, pero es otro dolor también individual.

¿Por qué asustarse?

Un nuevo miembro de la familia humana es pura ganacia; no sólo otra boca, sino cerebro, manos y espíritu, con sus talentos para aportar a todos. ¡Alegrémonos cada vez!