lunes, abril 30, 2007

Temblores


Que se mueva el piso --como en Chile cuando tiembla-- nos recuerda que ni el suelo que pisamos depende de nosotros


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué equivocados estamos, creyéndonos dueños de nuestra vida.

Saludos

Cind dijo...

Es verdad, Café, da un miedo tremendo cuando algo que siempre está ahí, inmóvil, dócil, presente, se convierte en una ola. Aquí el suelo da algunos sustos de tarde en tarde y te quedas paralizado.

alida dijo...

Pero muchas veces no nos movemos por miedo
Saludos

pon dijo...

Ni nos pertenece.

ir arriba